jueves, 28 de enero de 2010


Comienzo quizás con un final...

Lágrimas que no significaron nada hasta este momento, han rozado mi piel por sorpresa.
Día a día actos inconscientes, han ido destruyendo
aquello que aun no sabía que quería, de una manera diferente a todo lo conocido, a todo lo aprendido por una sociedad ignorante.
Y me siento mal, no me gusta hacer daño, no me gusta ser como soy...
y no puedo evitarlo.

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